Libros de agronomia gratis en pdf: Manual para injertos en Frutales

Muchas plantas de frutales tardan en dar flores, semillas o frutos, muchas veces hasta 20 años
El injerto es un método de propagación vegetativa artificial de las plantas, en el que una porción de tejido procedente de una planta —la variedad o injerto propiamente dicho— se une sobre otra ya asentada, de tal modo que el conjunto de ambos crezca como un solo organismo

Que es un injerto

Los injertos son un grupo de técnicas de propagación vegetal artificial que consisten en la unión de un fragmento vegetal con otro que ya está asentado, con el fin de que ambos crezcan como si de un solo organismo se tratase.
Al fragmento menor que se inserta se le llama “injerto” propiamente dicho, mientras que a la planta que recibe el injerto se la denomina “patrón” o “portainjerto”.

¿Qué beneficios tiene un injerto?

Los injertos se hacen para conseguir una serie de beneficios para el agricultor, entre los cuales podemos encontrar:
Una mayor resistencia a las condiciones climáticas y a las enfermedades o plagas de la zona: en ocasiones, la variedad o la especie que queremos cultivar no es la que mejor aguanta el clima o los patógenos de nuestra zona. Por ello, se elige un patrón que esté adaptado a estos pormenores, y en él se injerta la variedad de interés.
Árboles que den varios frutos distintos: se pueden lograr plantas-quimera que den varios frutos a la vez, siempre y cuando el injerto y el patrón sean compatibles. Normalmente, solo se pueden injertar especies que estén emparentadas, como por ejemplo el almendro con melocotoneros, o el naranjo y el limonero.
La transmisión de las características deseadas: ya que se trata de una forma de propagación asexual, podemos conseguir clonar una planta que no pueda ser cultivada mediante semillas.
Aceleración de la maduración de los frutos: el injerto se aprovecha de la madurez que posee el pie y puede ser cosechado en menos tiempo.
Conseguir la polinización en plantas dioicas: se pueden injertar ramas masculinas en árboles femeninos para lograr la polinización de la planta sin tener que dedicar espacio de cultivo a plantas masculinas.

¿Qué tipos de injertos existen?

Los tipos de injertos pueden ser agrupados en 3 grandes categorías, cada una de las cuales aglutina a una serie de técnicas distintas. Las 3 categorías de las que hablamos son:
Injertos de púa: para hacer un injerto de púa se corta la parte superior del patrón y se introduce una rama del injerto con dos o tres yemas. Existen varios tipos, como pueden ser los de “hendidura inglesa”, “corona” o “silleta”.
Injertos de yema: en este caso se injerta una yema lateral incluida en un poco de corteza (lo que se conoce vulgarmente por nudo). Un ejemplo de injerto de yema es el injerto “de escudete”.
 - Injertos por aproximación: se hace con dos plantas que se encuentren próximas entre sí, uniendo una rama de cada una para lograr la fusión de los dos cámbium. Un ejemplo es el injerto “por yuxtaposición”.
Existen varias formas de realizar los injertos, cada una con sus ventajas y sus desventajas. A la hora de injertar nuestras plantaciones deberíamos considerar cuál es la que mejor se adapta a nuestras necesidades e intentar consultar a los agricultores con experiencia o buscar en la bibliografía especializada, con el fin de obtener los mejores resultados



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